Mapa Castilla-La Mancha Mapa Albacete Mapa Ciudad Real Mapa Cuenca Mapa Guadalajara Mapa Toledo

Webmaster: C. Torres

 
 

Furgón de correo

ARTÍCULOS Y REPORTAJES
LA VÍA EN PLACA
Almudena Hernando Gutiérrez (30/11/2005) 
Jefe de Proyectos de Vía de Adif 

 

 

La denominada vía en placa es una solución aún no suficientemente experimentada en el tiempo pero que ya ha demostrado en la práctica importantes ventajas técnicas y, especialmente, desde el punto de vista del mantenimiento. Esta técnica es la que se ha empleado en la estación de Toledo con motivo de la construcción del nuevo acceso ferroviario de alta velocidad a la capital castellano-manchega.

La vía en placa es aquella que se asienta sobre hormigón o asfalto, sustituyendo estos materiales en su función al balasto. Los criterios para su construcción son mucho más exigentes que los de la vía convencional en lo que se refiere a nivelación, alineación y ancho de vía, ya que una vez instalada la corrección de posibles errores es muy costosa.

En este sentido, resulta de especial importancia prever un drenaje eficaz, con el fin de eliminar futuros problemas de mantenimiento, ya que en la vía tradicional es precisamente el balasto el que lo garantiza.

La vía en placa ofrece importantes ventajas a la hora de garantizar la posición correcta de cada uno de los elementos que la conforman, es decir, los carriles y traviesas, manteniendo especialmente inalterables los parámetros geométricos a lo largo del tiempo.

Las primeras estimaciones indican que este tipo de estructura precisa de un menor mantenimiento, que los expertos cifran en un 20 por ciento, circunstancia que permite reducir los tiempos de intervención y, por tanto, incrementar la disponibilidad de la infraestructura.

Otro de los aspectos positivos es la mayor seguridad y fiabilidad de su comportamiento y reparación ante descarrilamientos, que en un principio son menos probables, ya que la vía en placa presentados defensas: una activa, que reduce la formación de defectos transversales, lo que se traduce en una mayor estabilidad del tren; y una pasiva, basada en su robustez, lo que hace que sea más sólida desde el punto de vista estructural.

En cuanto a las expropiaciones, precisa menor anchura en la explanación, al no precisar banqueta, ni tampoco el espacio que ocupa el talud del balasto.

Desde la perspectiva de las desventajas, además de su precio, han de mencionarse los menores rendimientos en las operaciones de montaje de vía y la aparición de asientos en las transición es cuando se pasa de una infraestructura sobre terraplén a otra situada bajo túnel o sobre puente, que en el caso de la vía tradicional se soluciona a través de bateos.

En la estación de Toledo, se ha utilizado vía en placa con carril embebido tipo Edilón, cuya principal característica es que carece de traviesa, por lo que el carril queda apoyado en toda su longitud y, como consecuencia, se reducen las tensiones en el mismo y mejora el reparto de las cargas, tanto estáticas como dinámicas.

En este caso, el carril está recubierto por un elemento con propiedades elásticas (Corkelast), cuyas funciones son las de solidarizar el carril con la losa de hormigón, transmitir esfuerzos desde el carril a la losa y atenuar las vibraciones.

Otra de las ventajas de especial interés es que se reducen los problemas de mantenimiento, ya que no son necesarias las tradicionales sujeciones mecánicas, que son, por otra parte, frecuente fuente de defectos.

El vuelco del carril es imposible debido al polímero Corkelast que restringe por compresión y tracción los movimientos del carril en las tres direcciones. Este sistema proporciona una vía limpia, un sistema de drenaje simple y un carril protegido frente a la corrosión, al tiempo que la infraestructura se hace accesible al tráfico de vehículos de emergencia (bomberos, ambulancias, etc) en caso necesario.

Las tres vías de la estación toledana tienen longitudes de 287'82, 274'223 y 433'673 metros, respectivamente, y se han utilizado 950 metros cúbicos de hormigón en placa, otros 25 metros cúbicos de Corkelast, 61.000 kilogramos de armadura y 1990 metros de carril.

 

FASES DEL MONTAJE

1.- Construcción de un suelo de cemento

Se extiende una capa de treinta centímetros de espesor con suelo estabilizado con cemento que será la base de la losa de hormigón. La mezcla se realiza en central, para así dosificar por separado árido, cemento y agua.

El suelo de cemento no se extiende hasta que la superficie sobre la que asienta tenga la densidad debida y las rasantes indicadas en los planos.

Finalmente, se compacta por tongadas con rodillo liso.

2.- Posicionado del emparrillado que forma las armaduras

A continuación se coloca la armadura de la placa de hormigón. En Toledo la armadura ya viene premontada para terminar de enlazarla in situ.

Para colocarla se lleva un control topográfico colocando separadores en el suelo con el fin de respetar un recubrimiento mínimo de 5 cm.

3.- Losa de hormigón

El paso siguiente es el hormigonado de la losa de libre figuración con hormigón de 350 kilogramos por centímetro cuadrado de resistencia.

En la estación de la ciudad de Toledo se ha utilizado una extendedora con un encofrado adaptado, con lo que se logra optimizar el rendimiento y mejorar las tolerancias, al tiempo que el acabado final es más perfecto.

Durante el vertido y vibrado del hormigón se garantizará el perfecto relleno del hormigón entre la armadura e inexistencia de burbujas de aire, huecos o coqueras.

4.- Soldadura de carril

Concluida la losa de hormigón, se coloca el carril sobre ésta y, antes de introducirlo en la canaleta, se ejecuta la soldadura.

5.- Colocación del carril en la canaleta

Una vez soldado el carril ya se puede meter dentro de la canaleta. Antes de ello es necesario limpiar la superficie de la canaleta y llevar un estricto control topográfico para determinar el número de galgas que se necesitan.

Se colocan las galgas y las cuñas que le darán la inclinación de 1/20. Seguidamente se colocan unos tubos de hormigón junto al alma del carril (ver esquema 1) con lo cual se aligerará el volumen del elastómero Corkelast en el que quedará embebido el carril.

6.- Nivelación y alineación de carril

Se trata de operaciones fundamentales que deben realizarse con la máxima exactitud ya que, cualquier error en el posicionamiento del carril, no se podrá rectificar una vez vertido el Corkelast.

La nivelación se consigue mediante las galgas mencionadas anteriormente, a su vez, la alineación se logra mediante contracuñas de madera cada 1'5 m.

Los trabajos topográficos se realizan en un hilo (hilo director). La nivelación y alineación del segundo se lleva a cabo tomando al primero como referencia, mediante regla de ancho y peralte o similar.

7.- Preparación final para el vertido del elastómero Corkelast

Antes de verter el Corkelast es necesario preparar el carril y la canaleta. Para ello se procede de la siguiente manera:

A) Imprimación del carril y de las paredes de la canaleta
Para asegurar la correcta adherencia es necesario que todas las superficies en contacto con el Corkelast queden imprimadas. Este riego de imprimación se aplica con un pulverizador y en dos capas. Es necesario respetar unos tiempos determinados según la temperatura entre la primera y la segunda capa y entre la segunda capa y el vertido del Corkelast.

B) Protección de los bordes de la canaleta
Con objeto de proteger la placa de posibles salpicaduras de Corkelast, se cubre el borde de la canaleta con una cinta adhesiva.

8.- Mezclado, batido y vertido del elastómero Corkelast

El elastómero de unión entre carril y canaleta es el elemento esencial del carril embebido, por lo que debe prestarse atención a su correcto mezclado y batido, que se realizan al mismo tiempo.

Es necesario cumplir unos condicionantes de temperatura y tiempos con el fin de que la puesta en obra sea correcta.

9.- Hormigonado de canaletas de recogida de aguas

Para completar la sección de la vía en placa, se hormigona la parte central entre vías y las medias cañas laterales, que permitirán canalizar el agua.

Artículos relacionados:
Nuevo acceso ferroviario a Toledo en Alta Velocidad (Juan Carlos López Peco).
Primer tren de alta velocidad en el Nuevo Acceso Ferroviario a Toledo (Carlos Torres).

 
Artículos y Reportajes   Subir
© Federación Castellano Manchega de Amigos del Ferrocarril
Web optimizada para una resolución de 1024 x 768 píxeles
Información sobre la Web - Aviso Legal